Mariana quiso darse la vuelta pero mis manos que reposaban en su cintura la aprisionaron contra mi pecho, sentí su mirada inquisidora sobre mi rostro y me vi obligado a mirarla, sus ojos marrones me pedían por favor que la soltara y que siguiéramos como si nada, cerré los ojos unos instantes e intente disimuladamente soltarla.
-Hola Ben…-pronuncio despacio una vez que se giro dándome la espalda…-No sabía que venías.
El rubio nos miraba sin entender la situación pero cuando la petiza le regalo una sonrisa confortante su semblante cambio y una sonrisa se le dibujo, sonrisa que odie con toda mi alma.
-Es que Nacho y los chicos querían venir…-se rasco la nuca riéndose-Y bueno me entere por tu hermano que estabas acá y quise venir a disfrutar un poco con vos.
Mariana solamente asintió y yo tenía todas las fichas jugadas a que me le iba encima a romperle la carita de nene bonito por interrumpir un momento crucial, estaba ahí no mas de tenerla en mis brazos, de saborear otra vez sus labios pero ese pibe tubo que romper todo el esquema.
-¿Tomamos un trago?-escuche que él le ofreció mis ojos solamente se dedicaban a verla a ella.
Ella solamente asintió estaba por comenzar a caminar cuando tome uno de sus dedos, me miro y me pidió por favor que siguiéramos como estábamos intentando ser amigos una vez más, agache la mirada para no ver como se iba con otro hombre, ese hombre que estaba intentando robármela.
-¡Lo odio!-grite al aire sin tener a mi lado nadie que me escuchara, mire hacia la mesa que ocupábamos y la encontré invadida por todas las parejitas preferí evitar sentirme un perdedor y me dirigí hacia el baño.
Salí entre empujones del baño de hombres debido a la gran cantidad de gente que había pero no miraba a las personas que se me cruzaban.
-¡Mas cuidado!-escuche que una chica me grito al llevármela puesta sin querer porque otro me había empujado para poder pasar.
-Perdón, no quise…-le respondí sin mirar comencé a caminar cuando esa voz volvió a hablar pero esta vez llamándome por mi nombre.
-¿Peter? ¿Peter Lanzani sos vos?
Gire extrañado porque todo conocido ya me lo había cruzado pero al ver a la chica colorada de pelo largo con un cuerpo esbelto que estaba apoyada contra la pared y mirándome con una sonrisa no lo podía creer.
-¿Camila? ¿Camila Hernández?-ella me asintió y mis brazos la rodearon haciéndola girar por el aire.
Camila Hernández fue mi primer novia antes de Mariana, ella fue la causante de que durante unos meses con Mariana no nos pudiéramos ni ver la cara, Cami fue alguien especial demasiado diría yo, me regalo el primer te amo, la primera caricia que no era de mamá ni de alguna amiga, la primera chica que presente a mi familia, aunque me dolía decirlo ella fue la primera en todo antes que Mariana, bueno Mariana si fue la primera en algo, en algo muy especial.
-.♥.-
Benjamin se apodero de mi mano y comenzó a llevarme sin pedirme permiso, habíamos cruzado todo el lugar hasta llegar a un lugar apartado mucho mas tranquilo.
Solo se veían sillones de color blanco, algunas que otras mesas y una barra al final donde había pocas personas haciendo cola para comprar alguna bebida.
-¿Qué hacemos acá?-le pregunte después de sentarme en uno de los sillones individuales
Benja se sentó en otro enfrentándose a mi, tomo delicadamente con sus manos las mías-Tenía ganas de estar a solas con vos…-me acomodo un mechón de pelo detrás de mi oreja-Sin que nadie nos molestara.
Asentí lentamente mientras sostenía la mirada gacha, estaba incomoda y no sabía como salir de esta para colmo no tenía ni el celular encima para hacerme la distraída, suspire a la vez que liberaba mis manos para jugar con mi pelo.
-¿No vas a decir nada?-me pregunto al verme tan callada
-No se que decir…
Acerco mas el sillón hacia donde estaba yo y ahora nos encontrábamos solamente a centímetros de distancia, estaba acorralada sin saber para donde disparar.
-Lali-y mis ojos marrones se clavaron en los suyos claros que me miraban expectantes, esperanzados de que no lo rechazara por lo menos no una vez más.
-Ben yo ya te dije…-pero sus dedos fueron los indicados para callarme, cada segundo que pasaba se iba acercando más, esos dos dedos que me callaron comenzaron a contornear mis labios hasta llegar a mi mentón donde me sostuvo fuertemente.
-No me rechaces por favor…-no podía verlo a los ojos, no podía decirle que no tenía ganas de besarlo que no era con él con quien quería estar en ese preciso momento…-Es solo un instante…
Minutos después unos labios semi-carnosos pedían permiso a los míos para jugar con ellos, tarde en responderle pero cuando sentí como succionaba mi labio inferior comprendí que ya no podía dar marcha atrás así que me hice de fuerza para comenzar a responderle poco a poco.
Habremos estado unos cuantos minutos besándonos, él con sentimientos hacia mi y yo convenciéndome que esos labios eran de otro hombre hasta que el celular de Benjamin corto el ambiente que formamos.
-¡Carajo!-se quejo separándose de mi, yo suspire disimuladamente mirando hacia todos lados…
-¿Paso algo?-le pregunte al ver que cerraba la tapa de su móvil con disgusto
Se paro y caballero como es me ayudo a pararme a mí…-Si los chicos quieren irse y no puedo dejarlo tirados…-yo lo alenté a que se valla diciéndole que comprendía.
-Bueno nos hablamos…-le comunique cuando volvimos a estar en el patio del boliche.
-Dale pero primero te acompaño hasta donde están tus amigos…-yo negué rápidamente-Nada de no, no voy a dejar que cualquier buitre se te acerque…
Le agradecí dulcemente con un corto beso en los labios e inconcientemente deje que entrelazara sus brazos en mi cintura y de esa forma comenzar a caminar hasta llegar a mi mesa.
-¡Ha bueno!-reconocí la voz de Victorio-¡Se lo tenían bien guardadito eh!
-¡Petiza desde cuando que no me contaste!-esa era mi mejor amiga quejándose de algo que no había sucedido.
Benjamin río y soltándome delicadamente aclaro que no había nada serio entre nosotros pero al agregar la palabra todavía sentí que mi cuerpo se tensaba.
-Bueno ahora si sana y salva me voy…-me giro un poco quedando de costado-Te llamo…-y se despidió con un pequeño pico, cuando se alejo mis ojos se encontraron con otros, unos de color verde que me miraban desorbitados sin comprender que había sucedido en ese instante.
Cande que se había parado para acercarse a mí fue obligada a tomar de nuevo asiento al lado de su novio quien la tironeo, todos de golpe se callaron y prestaron atención a nuestra reacción.
-Creo que acá se viene la gran tercera guerra mundial…-acoto Eugenia en un susurro
Agus se acomodo un poco en su lugar y en el mismo tono en que ellos solo podían escuchar dijo-La vena de Peter en cualquier momento explota.
-Ojo todavía falta la reacción de Lali-ese fue Gastón uniéndose a la charla, todos le preguntaron el porque-No notaron que Peter esta tomado de la mano con una chica…-y todos los pares de ojos se dirigieron a la chica que estaba detrás de Juan Pedro y no se dejaba ver del todo.
-¡No puede ser!-grito Mery al reconocerla.
-¡Camila!-ese fue el grito de todos mis amigos juntos y en ese instante mis ojos se llenaron de lágrimas al igual que los de él, al parecer no íbamos a poder estar bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario