Capitulo dieciocho: Una estrella en tu vientre
Dos meses después el vientre había crecido de repente, mostrando el crecimiento de un pequeño que ansiaba por conocer el mundo.
Adam había logrado convencer, con ayuda de Carol y Alexandra, a Emily para que volvieran a vivir juntos y así poderla cuidar como le había prometido.
Al principio sucedían situaciones incomodas para ambos, el verse y no poder besarse, estar sentados en el living mientras uno leía y el otro componía se les hacía demasiado difícil aguantar estirar el brazo y hacer una caricia, las noches eran torturas para él, acompañarla a la cama, arroparla y ver que estaba todo bien para luego apagar la luz y pronunciar un simple adiós e irse como apareció.
Al segundo mes de haber vuelto a vivir juntos, Emily había comprendido que ninguno de los dos iba a romper el hielo y reconciliarse como les sucedía antes, si no que ahora otra personita se iba a encargar de unirlos de reconciliarlos, de eso estaba segura.
El segundo miércoles de diciembre se cumplía los dos meses desde que habían vuelto a vivir juntos.
Nueva York había amanecido frío disfrutando de las vísperas navideñas, cada familia poco a poco había comenzado a adornar sus propias casas demostrando su espíritu, mientras que en un departamento de la gran manzana…
-¡Ya llegue!-anuncio Adam mientras cerraba la puerta del departamento como podía.
Por el pasillo se dejo ver a Emily con sus ya cinco meses de embarazo y una panza que había crecido de la noche a la mañana…
-¡Por fin hombre!-exclamo ansiosa mientras tomaba entre sus manos la bolsa que contenía los panes saborizados que se le habían antojado-Pensé que no ibas a venir más nunca.
Adam solamente la quedo mirando desde la puerta, todavía no caía que llevaban dos meses viviendo juntos y no había caído a la tentación que su cuerpo le exigía.
Cada día que pasaba la amaba mas, de eso no tenía duda ni la mínima, amaba verla pasarse crema sobre su vientre durante las mañana, amaba escucharle cantar al pequeño.
"Al final es verdad lo que dicen sobre las mujeres embarazadas, cada día se ponen mas hermosas…" pensó para sus adentros.
Luego de estar un rato hablando y sin recibir ninguna respuesta giro para reprocharle a Adam la falta de atención pero verlo como estaba hizo que se pusiera colorada desde la punta de los pies hasta el último pelo de su cabello.
-Adam, ¿tengo algo?
Le pregunto mientras se pasaba las manos por sus desdeñadas trenzas intentando acomodárselas, pero al ver que no recibía respuesta comenzó a ponerse más nerviosa.
-¿¡Que tengo Adam?!
Volvió a preguntarle desesperada mientras se limpiaba inultimente la cara, él tardo unos minutos mas en reaccionar y al ver a Emily con el pelo revoltoso, con una mano ocupada por uno de los panes y la otra con un pañuelo intentando limpiarse, era una imagen tan tierna pero graciosa a la vez para Ada, que no pudo evitar que una carcajada se le escapara.
-¡Adam deja de jugar ya!-le grito enojándose
-Perdón-le respondió él intentando calmar la risa-Pero es que te me hacías muy graciosa.
Emily solamente lo fulmino con la mirada y acercándose a la mesa del comedor le tiro con
un repasador, lo que causa mas risa en él, ella simplemente tomo su bolsa de panes y se dirigió a encerrarse en su pieza dejando a Adam llamándola repetidas veces.
La tarde callo sobre la ciudad y una vez que Adam había logrado que Emily le perdonara su "insolencia" y compartir un almuerzo entre risas y charlas, se prepararon para una visita muy importante, la primera ecografía 3D donde podrían conocer si desearan el sexo de su hijo.
-¿Estas lista?-le pregunto desde la puerta…
Ella se encontraba terminándose de colocar una sandalia cuando escucho que Adam la volvía a llamar….
-Claro, como él no es el que tiene esta barriga en cinco minutos esta preparado pero yo estando con ella no puedo…
Refunfuño entre dientes mientras se paraba frente al espejo y se revisaba por última vez…
-¡Emily!
Grito por octava vez y esta por gritar una novena vez, cuando frente a él se paro ella cruzándose de brazos y mirándolo demasiado molesta.
-Creo que hoy no es tu día de suerte para conmigo…
-¿Por?-le pregunto inocentemente…
Emily solamente lo empujo haciendo que se corriera de la puerta para así salir del departamento y dejar a un Adam totalmente desconcertado antes los cambios de humor que nunca se acostumbraría a pasar.
Media hora después, se encontraban en la sala de la clínica esperando que los nombraran…
-¿Sra. Emily Michelle Whitfield?
Al instante de escuchar su nombre le pego un codazo a Adam, él cual se estaba quedando dormido y se levanto para entrar al consultorio mientras que él medio adormilado la seguía.
-Bueno, Emily acuéstate en la camilla y levántate un poco la blusa así te coloco el gel y comenzamos con la ecografía…
Ely hizo lo que la doctora le pidió y mientras esperaba que terminara de colocarle el ultrasonido para escuchar el latido del corazoncito viro su mirada hacía Adam, él cual miraba todo detalladamente como si estuviera en un sueño.
-Adam…-lo llamo en un susurro a la vez que le estiraba la mano.
Él sin dudarlo tomo la mano de ella entre la suya apretándola fuertemente, demostrándole que no estaba sola y que nunca lo estaría, que él sea bueno o mala estaría con ella siempre.
-Bien comencemos…
Anunció la doctora luego de unos minutos, coloco el gel frío sobre la barriga de Emily y comenzó a realizar la ecografía.
-Ahorita en esta pantalla-explico señalando un monitor-Se pondrá la imagen de su hijo, conocerán antes que a todos a su pequeño fruto.
Adam miro alucinado a Emily, la cual estaba llena de lágrimas sin creerse lo que le estaba pasando.
-Emily, Adam les presento a su hijo…
-Mi bebe…-dijo en un susurro ella mientras se secaba algunas lágrimas…
Adam le dio un pequeño beso en el dorso de la mano y sin apartar la mirada del monitor le dijo a Emily…
-Gracias…Gracias por llevar una estrella en tu vientre…
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